Puedes orar a Dios por tus supervisores pidiéndoles que les dé las gracias necesarias para manejar todo su trabajo. Pídele a Dios que les dé sabiduría para tomar las mejores decisiones y que les brinde el coraje de enfrentar cualquier problema que se presente.
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Puedes orar a Dios por tus supervisores pidiéndoles que les dé las gracias necesarias para manejar todo su trabajo. Pídele a Dios que les dé sabiduría para tomar las mejores decisiones y que les brinde el coraje de enfrentar cualquier problema que se presente.
Ora para que tu supervisor tenga una relación fuerte y estable con Dios, ya que esto lo guiará en todas las áreas de su vida.
Oración principal.
Dios, ayúdanos a ser buenos supervisores para que podamos guiar a nuestros subordinados con sabiduría y amor.
Dios, danos la paciencia necesaria para lidiar con nuestros subordinados, especialmente cuando están siendo difíciles.
Dios, guíanos a tomar decisiones justas y a ser consistentes en nuestro trato con todos.
Dios, ayúdanos a ser humildes y a no dejar que el poder que tenemos vaya a nuestra cabeza.
Dios, danos el valor que necesitamos para enfrentar a nuestros subordinados cuando están haciendo algo mal.
Dios, ayúdanos a no ser manipuladores y a no usar nuestro poder para hacer daño a otros.
Dios, danos la sabiduría para saber cuándo intervenir y cuándo dejar que nuestros subordinados aprendan por sí mismos.
Dios, ayúdanos a no tomar las cosas personalmente y a no dejarnos llevar por nuestras emociones.
Dios, danos la fuerza para seguir adelante cuando nuestros subordinados nos hacen sentir como si no fuéramos buenos en nuestro trabajo.
Dios, ayúdanos a recordar que nuestros subordinados son personas también, y que merecen nuestro respeto y nuestra compasión.
¿Sabías estos datos curiosos?
1. A veces, los supervisores oran para que los empleados sean más eficientes en el trabajo.
2. También piden por el bienestar de los empleados y su familia.
3. Muchos supervisores oran para que Dios les dé sabiduría y discernimiento en el manejo de los conflictos en el lugar de trabajo.
4. Algunos oran para tener paciencia y amabilidad con los empleados.
5. También piden por la unidad entre los empleados y el personal de la empresa.
6. Otras oraciones pueden incluir la protección contra el peligro y el mal, y las bendiciones para los empleados.
7. Por último, los supervisores a menudo oran para dar gracias a Dios por los buenos empleados y el trabajo que hacen.
Oración de Protección para CONSERVAR y TENER ÉXITO en EL TRABAJO
¿Por qué debemos orar a Dios por los supervisores?
Debemos orar a Dios por los supervisores para que puedan dirigirnos y guiarnos en nuestra labor diaria. Oramos para que tengan la sabiduría y el discernimiento necesarios para supervisar nuestro trabajo de la manera más efectiva y eficiente posible. Los supervisores son una parte integral de nuestras vidas y nos ayudan a estar seguros y alcanzar nuestras metas.
¿Qué efectos tiene la oración?
Hay muchos efectos positivos de orar a Dios para los supervisores. Al orar, los supervisores pueden pedir dirección y guía de Dios para tomar las mejores decisiones para su departamento y sus subordinados.
También pueden orar por el bienestar de sus subordinados, para que sean protegidos y prosperados. Algunos otros beneficios de la oración para los supervisores pueden incluir una mejor perspectiva, mayor paz interior, y un mayor sentido de motivación y enfoque.
¿Cómo podemos saber si la oración a Dios para los supervisores está funcionando?
Primero, podemos considerar si estamos orando de acuerdo con la voluntad de Dios. 1John 5:14 dice: «Y esta es la confianza que tenemos en él que, si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye.» Así que, si estamos orando conforme a la voluntad de Dios, sabemos que él nos está escuchando.
También podemos evaluar si nuestras oraciones están siendo respondidas de acuerdo con lo que pedimos. 1Juan 5:15 dice: «Y si sabemos que él nos oye en todo lo que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hicimos a él.» Esto no significa necesariamente que todas nuestras oraciones serán respondidas de la manera en que las esperamos, pero podemos estar seguros de que Dios está escuchando y respondiendo a nuestras oraciones de acuerdo con su voluntad y para nuestro beneficio.